martes, 25 de abril de 2017

10 habilidades que necesitas para subir de puesto



Si tienes buenas ideas para mejorar las cosas en tu trabajo diario, el próximo ascenso puede ser tuyo. Asegúrate de desarrollar las competencias de un buen jefe.

10 habilidades que necesitas para subir de puesto


Los trabajadores observamos de manera crítica el desempeño
de nuestros jefes, cuestionamos su .estilo
de trabajo, sus decisiones,
su manera de organizar las actividades
e incluso su personalidad.

La mayoría de nosotros hemos pensado que las cosas podrían
hacerse mejor, que nuestros superiores cometen muchos errores, y que son responsables,
en gran medida de los obstáculos que enfrentamos en el trabajo diario.

Es sencillo pensar qué haríamos nosotros si estuviéramos en
sus zapatos, pero ¿realmente hemos desarrollado las habilidades necesarias para convertirnos en líderes en el futuro?

El próximo ascenso podría ser el tuyo, así que te damos
algunos consejos para trabajar en tus competencias de liderazgo.


1. Asume tu responsabilidad
Un líder es responsable de su equipo, de los resultados, de repartir el trabajo, de supervisar el
desempeño de los demás, entre otras tareas.

A menudo se dice que un puesto de mayor jerarquía siempre implica mayor responsabilidad. Asumirla
significa que respondes por el trabajo y por los resultados, sean buenos o
malos. No es válido decir: ‘yo no sabía’
‘no me informaron’ ‘x persona no hizo su trabajo’ estas y otras frases que
evaden la responsabilidad están prohibidas para un verdadero líder.

2. Sal de tu zona de confort
Para alcanzar un alto nivel de liderazgo es necesario tomar
riesgos y probar caminos nuevos. Ningún gran líder se ha caracterizado por
utilizar siempre la misma fórmula.

No necesitas ser jefe para aprender a tomar riesgos, inicia hoy aceptando
ese proyecto que nadie quiere tomar o aprendiendo una tarea que implica
dificultad y reto.

3. Hechos, no palabras
Cuando estamos con otros colegas es fácil hablar de las
fallas y decir qué haríamos diferente y cómo lo haríamos. Sin embargo, no sirve
de mucho si no tomamos la iniciativa de proponer
una nueva idea.

A menudo nuestro argumento es que las cosas no cambian, que
no vale la pena el esfuerzo o que nadie nos escucha. La pregunta es ¿cuántas
veces lo hemos intentado? La próxima vez que tengas una mejor idea para resolver un problema ¡comunícala!

4. No esperes retroalimentación ¡pídela!
Deja de esperar que tu superior se acerque para darte un
informe detallado de cómo le parece tu desempeño. Tampoco esperes los periodos
de evaluación –en caso de que los haya en tu empresa- para pedir
retroalimentación.

Un líder efectivo no
le teme a la crítica, la ve como una oportunidad de aprender. Tomar en
cuenta la opinión de otros no solo te ayuda a mejorar, también te prepara para .crear
mejores ambientes de trabajo en el futuro.

5. Prepárate
Para dirigir a un grupo de trabajo es necesario conocer la
operación de tu industria y actualizarse
constantemente, si aspiras a un puesto de mayor responsabilidad en el
futuro, la capacitación continua debe ser una de tus prioridades.

Puedes aprender cosas nuevas dentro de tu oficina,
acercándote a otros departamentos o realizando
tareas nuevas. También puedes buscar el conocimiento fuera de tu trabajo,
invirtiendo en tu formación profesional.

6. Levanta la mano
Tener iniciativa
es una de las cualidades que definen a un líder. Identifica las áreas en las
que tu trabajo puede ser útil o hacer la diferencia y ‘levanta la mano’ para proponer un nuevo proyecto o hacerte cargo
uno que esté en el olvido.

Ofrécete como voluntario
para colaborar con otro departamento y ‘dar un plus’. Esto puede significar
algunas horas de trabajo extra, pero también es una oportunidad de conocer la operación de otros departamentos,
establecer relaciones útiles con tus compañeros de trabajo y desarrollar nuevas
habilidades.

7. Practica la comunicación efectiva
Para ser un buen líder hay que saber comunicarse, tener una
buena actitud y establecer relaciones
positivas. Haz preguntas, comparte información útil, inicia conversaciones
y sé cordial.

La buena comunicación está asociada con la inteligencia
emocional, que permite regular nuestras emociones y mejorar nuestras habilidades sociales. Si además de ser
una persona capaz, demuestras que puedes comunicarte de manera efectiva con
otros, tendrás mucho a tu favor para lograr un ascenso.


8. Cuida tu imagen
Tu apariencia debe ser consistente con la persona que eres:
responsable, disciplinada, creativa, innovadora, segura, etc.

No se trata de vestir para impresionar, sino de vestir para influenciar, para ser
tomado en serio y generar confianza. Haz que tu apariencia comunique los
atributos positivos que posees.


9. Ejercita tu disciplina
Un rasgo que comparten muchos líderes exitosos es la
disciplina. De nada sirven los conocimientos y el talento si no eres capaz de
enfocarte en proyectos concretos ¡y
terminarlos!

10. Muestra humildad
Las personas más talentosas y exitosas no se sobrevaloran.
Son capaces de admitir un error y entender los errores de otros. Sin duda
buscarán la excelencia y tratarán de inspirar a su equipo para alcanzarla.

La humildad está asociada con una mente flexible y abierta al
cambio, dispuesta a escuchar y a aprender todo el tiempo.

Fuente del  Artículo:altonivel

miércoles, 5 de abril de 2017

11 señales de que te falta inteligencia emocional


Estos son los comportamientos que debes eliminar de tu repertorio si quieres alcanzar el éxito.

11 señales de que te falta inteligencia emocional

ENERO 25, 2017

Por:Travis Bradberry

Cuando el término “inteligencia emocional” se comenzó a popularizar, ayudó a la gente a darse cuenta de algo: las personas con inteligencia promedio superan el trabajo de aquellas que son más inteligentes en el 70% de las veces. Esta anomalía demostró que no basta la cultura o ágil mental para triunfar en la vida.

Décadas de investigación han demostrado que la inteligencia emocional es un factor crítico que hace que las personas se destaquen del resto, La conexión de este índice con el éxito es tan grande que el 90% de los mejores profesionistas tienen una alta inteligencia emocional. 

La inteligencia emocional es “algo” dentro de todos nosotros que es intangible. Afecta como manejamos nuestro comportamiento, navegamos las complejidades sociales y tomamos decisiones para alcanzar resultados positivos. 

A pesar de su importancia, es difícil saber realmente cuánta inteligencia emocional tiene una persona y qué se puede hacer para mejorarla. Se pueden tomar pruebas validadas científicamente, pero lamentablemente no son gratuitas. 

Me puse a analizar cientos de pruebas que hemos hecho en mi empresa TalentSmart para identificar los comportamientos típicos de personas con baja inteligencia emocional. Son acciones que debes tratar de evitar en el futuro. 

1. Te estresas con facilidad
Cuando te comes tus sentimientos, estos se acumulan hasta generar sensaciones como tensión, estrés y ansiedad. Las emociones ignoradas dañan el cuerpo y la mente. La inteligencia emocional te ayuda a manejar mejor el estrés al ayudarte a identificar las situaciones que te agobian y a enfrentarlas adecuadamente a tiempo. 

Las personas que no usan su inteligencia emocional tienden a apoyarse en otros métodos, menos saludables, para manejar la presión. Tienen el doble de posibilidades de experimentar ansiedad, depresión, abuso de sustancias e incluso de intentar el suicidio. 

2. Te cuesta trabajo ser asertivo 
Las personas con buena inteligencia emocional tienen un buen balance de buenos modales, empatía y cordialidad, pero son capaces de establecer límites. Esta combinación es ideal para manejar los conflictos. Cuando la mayoría de la gente está enojada, estas personas con buena IE se mantienen calmadas y balanceadas ya que se alejan de las emociones mal manejadas. Esto les permite neutralizar a las personas difíciles o tóxicas sin generar enemigos. 

3. Tienes un vocabulario emocional limitado
Todas las personas expresamos emociones, pero solo unas cuantas son capaces de identificarlas con claridad mientras ocurren. Nuestra investigación arroja que solo el 36% de las personas pueden hacer esto, lo cual es problemático porque las emociones poco entendidas generalmente causan malos entendidos, elecciones irracionales y acciones contra productivas. Las personas con buena IE dominan sus emociones porque saben identificarlas y tienen un gran vocabulario para nombrarlas. Muchas personas simplemente definen su estado de ánimo como “malo”, las emocionalmente inteligentes saben decir “frustrado”, “ansioso”, “irritable”, etc. Cuanto más específica sea la palabra, mejor conocimiento tendrás de qué estás sintiendo, qué causa la sensación y qué hacer al respecto. 

4. Asumes cosas rápidamente y defiendes tus posturas con vehemencia
Las personas que carecen IE forman opiniones rápidamente y sucumben a información vaga, que apoye sus propias posturas e ignoran cualquier cosa que pueda llevarles la contraria. Muy frecuentemente, discuten ad nauseam para defender un punto. Esto es especialmente peligroso para los líderes, pues sus ideas poco analizadas se pueden volver la estrategia de todo un equipo. Las personas emocionalmente inteligente marinan sus pensamientos porque saben que las reacciones iniciales se mueven por los sentimientos. Dejan que sus pensamientos se desarrollen y consideran consecuencias y contrargumentos posibles. Luego comunican su idea de la manera más efectiva posible, considerando las opiniones de la audiencia. 

5. Guardas rencores
Las emociones negativas que vienen con los rencores son, de hecho, una respuesta al estrés. Solo pensar en la ofensa que recibiste hace que tu cuerpo entre en “modo de supervivencia”, un mecanismo que hace que te levantes y pelees o salgas corriendo ante una amenaza. Cuando el peligro es inminente, esta reacción es esencial para sobrevivir, pero cuando el peligro ya pasó, guardar ese estrés es muy dañino para ale cuerpo y puede tener consecuencias devastadoras con el tiempo. De hecho, investigadores de la Universidad Emory descubrieron que guardar el estrés contribuye a tener presión alta y enfermedades del corazón. Guardar un rencor significa que estás guardando el estrés de un enojo y las personas emocionalmente inteligentes saben que deben evitar esto. Soltar las cosas no solo te hace sentir mejor, también puede ayudar a tu salud. 

6. No sueltas tus errores
Las personas emocionalmente inteligentes se alejan de sus errores, pero no los olvidan. Al mantenerlos a una distancia prudente pueden recordar las enseñanzas que dejaron para alcanzar el éxito futuro, pero no dejan que los detengan. Saben manejar muy bien la delgada línea entre recordar y revivir.  Revivir demasiado los errores hace que te dé ansiedad y miedo de intentar cosas nuevas, mientras que olvidarlos por completo hace que los repitas. La clave del balance está en tu habilidad de transfromar los fracasos en lecciones que te ayuden a mejorar. 

7. Sientes que la gente no te entiende
Cuando te falta inteligencia emocional es difícil entender cómo te ven los demás. Te sientes poco entendido porque no puedes dar tus mensajes de la manera correcta. Las personas con alta IE saben que aun con práctica no siempre se da una comunicación 100% efectiva. Saben darse cuenta cuando las personas no los están entendiendo, ajustan su estrategia y recomunican su idea hasta que se dan a entender.

8. No sabes cuáles son tus disparadores (triggers)
Todos tenemos disparadores, situaciones o personas que nos presionan y nos llevan a actuar de manera impulsiva. Las personas emocionalmente inteligentes estudian estos triggers y evitan las situaciones o individuos que les pueden hacer perder la cabeza. 

9. No te enojas
No es que las personas emocionalmente inteligentes no se enojen, pero manejan mejor sus molestias para obtener el mejor resultado posible. A veces esto es simplemente mostrar que estas enojado, triste o frustrado. Ocultar tus emociones constantemente con una falsa actitud positiva no es genuino ni productivo. Las personas con buena IE emplean las emociones negativas y positivas en las situaciones correctas.

10. Culpas a otros por como te hacen sentir
Las emociones vienen de dentro. Es muy tentador atribuir tus sentimientos a las acciones de otros, pero debes tomar responsabilidad por ellas. NADIE PUEDE HACERTE SENTIR ALGO QUE TU NO QUIERAS SENTIR. Pensar lo contrario solo te frena. 

11. Te ofendes con facilidad
Si sabes muy bien quién eres, es difícil que las cosas que otros dicen o hacen respecto a ti te molesten. Las personas con sanidad emocional son seguras y de mente abierta. Incluso pueden burlarse de sí mismas porque saben muy bien cual es límite entre el humor y la degradación. 

En conclusión… 
A diferencia del IQ, la IE es muy maleable. Puedes entrenar a tu cerebro repitiendo actitudes y acciones inteligentes. Cuando tu cerebro refuerza estos comportamientos, las respuestas anteriores se van borrando de los caminos neuronales. Antes de que te des cuenta, estarás respondiendo con más inteligencia emocional. 

Fuente del Artículo: entrepreneur.com